LA RENUNCIA
Y necesité tomar distancia para recuperar lo querido, sobrevolar lo preciado, contemplar desde lejos y con dolor la deformidad de lo construido. Porque solo en la ausencia, en el vacío, tomó de nuevo sentido. Hoy sé que la permanencia no es física, tienes que jugártela, y dejar hacer al destino. Hoy sé también, que has de luchar contra la culpa del abandono, pues solo mortifica y nunca da un saldo positivo.
CONTEMPLACIÓN
Y con la desnudez otoñal pude ver las ramificaciones,
como vasos sanguíneos conectados,
una maraña de vida con infinito orden,
esperando de nuevo su abrigo,
como hacemos todos al fin y al cabo.
ESPEJO
Para hablarte de ti,
solamente he de hablarte de mí
BIOGRAFÍA
Laura Cubillo. Me gusta definirme como una buscadora incansable de mi lugar en el mundo que intenta con esfuerzo practicar cada día su capacidad de resiliencia. Nací en Bilbao el 2 de Julio de 1972 y esa búsqueda me llevó a dejar mi lugar de origen a los treinta años y afincarme en una hermosa ciudad: Toledo. Llevo en ella quince años y el arte, en sus diversas formas, es una constante en mi vida.
Soy Dinamizadora Comunitaria de profesión y en los últimos años he trabajado en diferentes ONGs como Mediadora Intercultural. Para ejercer mi profesión con coherencia no dejé nunca de formarme. Soy Experta en Cooperación al Desarrollo, RSC y DDHH. Hace un año que trabajó en Taiga, una librería toledana que supone un refugio con amplias ventanas al exterior. Me gusta pasar mis días rodeada de libros.
POETICA
Mi antología de relatos cortos, prosa-poética y paremias la enmarco en una obra llamada “SIENDOSINSER” que resume una experiencia en la que nada es lo que parece y en la que la búsqueda diaria de todo aquello que se presupone bueno para una persona (felicidad, alegría, plenitud, abundancia) ha de llevarse a cabo precisamente con los vestigios del mismo objeto a buscar.
La creación responde a una necesidad de adaptarme a mis circunstancias. Soy una persona con una extrema receptividad y mi obra está generada por diferentes estímulos. A veces la premura de vaciar mi mente hace que escriba en cualquier trozo de papel que encuentro. En la mayoría de ellos juego con el lenguaje, con el doble sentido de la vida o con la lectura bipolar que puedan llegar a tener los conceptos y las experiencias.
