Chopin, El Veronés, las Carreras de Ascot,
el cielo que contemplo;
vuelan pájaros camino de la luz,
la sombra. Sólo tu amor y el agua.
P.G.B.
Era una flor y se llamaba Herminia.
Mujer feliz, armónica, de extremada constancia,
la voluntad rondaba sus pezones. Era de Chipiona.
Siempre acudía desnuda con aliento y sin sombras
mientras toda la ropa acechaba la luna.
Decía que me quería y cuando preguntaba
si el amor corresponde sin llegar a la muerte,
cerraba bien los ojos y lejos de la historia,
recitaba los versos con aceites paganos.
Y una tarde, le dije, con mi lengua en su sexo,
“En la confirmación debes cambiar tu nombre”.
(Inédito)
TINTÍN PIERDE LA VIRGINIDAD EN LA SCALA
Lo decía Tintín mientras ladrabas:
“Milou, debes latir con propiedad extrema
todo aquello que piensas, buen amigo”.
Pero el pobre fox seguía empeñado
en tomar esa gota de whisky mal vertida
de la falda de Bianca, Castafiore.
Irma siempre molesta. Quería atrapar
sus pechos con las manos. El perro,
tan listo zorrero como leal amante,
mordía un dedo del pie y acariciaba
pausado sus pelotas. Bianca gime.
Tintín ha perdido la virginidad en La Scala.
Hicieron el amor sudacamente.
De fondo Lakmé. Delibes argumenta,
es muy retórico y a veces cursi.
Léo llora entre las flores. El joven
tiembla y sonríe. Bianca gime.
¡Qué mala cara tiene la pollito!
De Cartoons (2011)
SEGUNDA INCLINACIÓN
Amar siempre se escribe con hache intercalada.
Debe ponerla en medio, entre la i y la o.
No es bueno complicarse.
Total si son tres días y hemos gastado cinco,
para qué desatar lo imprevisible.
Recuerde, amar, al igual que estipendio,
debe escribirse así, con hache.
Y debe dar igual que usted sea peluquera,
cajera o cocinera. Amarse por minutos
no concibe de fraudes, ni siquiera de oficios vespertinos.
De día nos pela el alma y de noche la tibia.
Segunda inclinación, o misión, o concierto.
Tengo las cartas malas. Esta partida sobra.
No dio nunca lo mismo ser letra o alfabeto.
No me conviene hablar, hablar no me conviene.
Aunque debo decir, si es usted quien me escucha,
que amar se escribe siempre con hache intercalada.
De Una aproximación al desconcierto (2011)
GIACOMO CASANOVA
Quiero ser un dios vivo
muy sensible a la luz
que con sus rayos
domina infatigable los días,
los astros, los encuentros de marzo
con la lluvia y las nubes.
La tierra es misteriosa y el sol
desciende entre la niebla
y entre el atardecer tan solitario.
En marzo te busqué por las orillas,
por los patios de rosas perfumadas,
por las cuestas e iglesias de los pueblos.
Tuve que esperar mucho,
que llegaran las tardes, las noches,
demorar el silencio de las almas
y palpar con mis manos
ese blanco detalle que presentan los muros.
Sólo la cal en piedra es un adorno,
no contiene ruinas ni secretos,
ella se muestra pura.
Van cantando los pinos a sus troncos,
las jaras en la tarde eran tus ojos
que se ocultaban con el día.
Yo lloré por tu rostro,
por el ángel que tienes en ti misma,
por esa indiferencia de tus manos
que se apagan en marzo como nadie.
Ahora la lluvia roza los cristales,
llama –como la luna blanca-
antes que el tiempo acabe,
antes que la sonrisa apagada que posees
se detenga en las calles
que no reconocimos,
antes que una mano de amor
consuele la amargura de mi llanto.
Chopin, El Veronés, las Carreras de Ascot,
el cielo que contemplo;
vuelan pájaros camino de la luz,
la sombra. Sólo tu amor y el agua.
De Derrota y muerte a los héroes (1988)
Javier Sánchez Menéndez (Puerto Real, Cádiz, 1964) es autor de los poemarios Motivos (1983), El violín mojado (1991 y 2013), Introducción y detalles (1991), Última cordura (1993), La muerte oculta (1996), Una aproximación al desconcierto (2011), que aparecía tras quince años de silencio poético, y Una aproximación al desconcierto (v.2.0) (2011), así como de la plaquette Cartoons (2011). De su poesía han aparecido dos antologías: Faltan palabras en el diccionario (Poemas escogidos 1983-2011) (2011) y Por complacer a mis superiores (2014). También es autor de varias antologías y libros de ensayo, entre los que destacan La vida alrededor (2010), Teoría de las inclinaciones (2012) y Libre de la tormenta (2013). En EEUU se publicó en 2013 el primer volumen de su obra El libro de los indolentes. Colabora en diversos medios de comunicación nacionales.