La ironía es una tramoya en la que no sabemos dónde termina la inteligencia y dónde comienza la cobardía
Era un hombre precavido: pensaba con ambas manos.
A veces nómada como a veces sedentario. No sabía que su carácter estaba forjado de universo.
Su realidad se alimentaba de ficción y por eso la superaba.
La ironía es una tramoya en la que no sabemos dónde termina la inteligencia y dónde comienza la cobardía.
Ni nos salva ni nos condena. La escritura nos previene.
Escribir lo que jamás leerás. Leer lo que nunca escribirías.
Escribir como se exhala: llegar a ese estadio.
La primera palabra en la escritura como el primer beso en el amor.
Cualquier dogmatismo, provenga de la razón o se nutra de las pasiones, envilece.
¿Seguir escribiendo? Con el punto final llega a veces la respuesta.
Txus Velasco seguirá escribiendo, pero de otra manera y en otro lugar.
