Microapuntes
Txus Velasco
Ten paciencia, reconstruiremos este siglo. Sólo hace falta otra hecatombe.
Las vanidosas frasecillas de los cínicos: material de derribo.
Jugaba en un trozo de tierra lleno de maleza y trozos de ladrillo. Llegó a profesor.
Un libro de lectura en las escuelas: Manual para distinguir a un sabio.
Cada nueva frase nos acerca al silencio definitivo.
Sencillez del escritor: volver a su trabajo otra mañana de lunes.
Creed en lo que escribe: no lo hace por dinero.
Se besaron con fuerza los jóvenes amantes. El mundo en silencio se frotó las manos.
No dar respuestas, sino escribir y escribir sobre esas viejas preguntas.
Se besaron con fuerza los amantes nuevos. El mundo en silencio se frotó las manos.