Un guión para Artkino, novela escrita por Fogwill en los setenta, ha sido recientemente publicada en España y Argentina.
El autor nos sitúa en un contexto histórico pasado –1994– aunque también en un probable futuro, debido a su no ocurrencia en la historia real. Fogwill nos presenta una realidad tangible, que fácilmente podríamos imaginar. Una realidad "irreal" y, por qué no, curiosa de plantear: una Argentina perteneciente a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. El protagonista de la novela recibe el encargo de escribir un guión cinematográfico para los estudios comunistas Artkino, lo que podíamos considerar el Hollywood soviético. Ese guión cinematográfico quiere representar el año 2018 con una batalla ya ganada al capitalismo.
La composición de este guión es la excusa del autor para guiarnos por esta situación artificial a través de un texto que podríamos calificar de monólogo, ya que el narrador de la obra y el protagonista de la historia son la misma persona. A lo largo de la lectura disfrutamos de un juego de ironías, con partes más o menos ingeniosas que alternan con otras triunfalistas.
Fogwill nos sabe explicar y justificar una imaginaria Argentina socialista. En esa hipótesis histórica podemos situar las características comunes de cualquier régimen político: por una parte, el deseo de dotar de una mayor vitalidad el lado humano, es decir, la representación de un juego político que siempre termina girando en torno a los propios ciudadanos y, por la otra, sus sentimientos hacia esa forma de organización, reduciendo a su vez toda su conducta a ese trasfondo ideológico y justificando por él.