Música
15 años sin Atahualpa Yupanqui (O Martín Fierro tambien vivió el siglo XX)
Juancar Landa
23 de mayo de 1992. Nimes, Francia. La sexta edición del Festival "Cartelera" (dedicada a España y Latinoamérica) presenta una de sus veladas más cautivadoras, "Noche de América" , con la participación estelar del guitarrista, cantante y compositor argentino Atahualpa Yupanqui. El bandoneonista Rubén Juárez y el grupo musical "El Pueblo" le acompañarán sobre el escenario del Teatro Le Titoit.. "Don Ata" deja el Hotel Imperator Concorde de Nimes rumbo al Teatro cuando una "repentina indisposición" obliga a la organización a buscar un médico, que se limita a certificar su muerte "por causas naturales" . Dos semanas después, el 8 de junio, regresaban sus cenizas a ese querido Cerro Colorado argentino. Un puñado de amigos recordaba algunos de los versos que cantara el maestro: "Nada resulta superior al destino del canto (....) Si tu eres el elegido, si has sentido el reclamo de la tierra, si comprendes su sombra, te espera una tremenda responsabilidad (...)Y al llegar al final, tendrán su premio: nadie los nombrará, serán lo "anónimo", pero ninguna tumba guardará su canto".
31 de enero de 1908, Campo de la Cruz, Pergamino, Argentina. Nace "Don Ata" o "Tata", Héctor Roberto Chavero Aramburu. Sus padres -un quechua y una guipuzcoana-- a los seis años le sumergen en la educación musical, aprendiendo violín y guitarra con el profesor Bautista Almirón. En 1917 se trasladan a Tucumán y se produce una transformación en el pequeño Háctor. Comienza a sentir curiosidad por ese nuevo paisaje, por esos nuevos misterios, y firma como Atahualpa (en homenaje al último soberano inca) en colaboraciones del periódico escolar. También juega al tenis y boxea, pero sus inquietudes responden al descubrimiento de sus antepasados y a su querencia por la tierra. Con 19 años compone "Camino del Indio" (canción que ha crecido como himno del indigenismo), recorre el país con su guitarra y acaba ejerciendo mil oficios en Buenos Aires. En "El payador perseguido" canta "Buenos Aires, ciudad gringa / me tuvo muy apretao / Tuitos se me hacían a un lao / como cuerpo a la jeringa".
1950, Paris. El maestro Ata le escribe a su esposa Nenette que actuará junto a la nueva sensación de la canción francesa, Edith Piaf, en el Teatro Athenée. Es el colofón de una gira por Europa del Este -Hungría, Checoslovaquia, Rumania y Bulgaria- donde ejerce de militante del Partido Comunista (ingresó en el 45 y se apartaría de su militancia en el 52), muestra y da a conocer sus primeros libros y grabaciones. La década de los 60 será una dual promoción yupanquina; por un lado Japón, que acogió el mensaje del cantautor, y porotro, España, donde alienta a los cantantes invisibles de la dictadura franquista. El mayo francés se sonorizó en la península con Atahualpa, "el arte es una antorcha / que usan los hombres para andar de noche / y descubrir la belleza en el camino".
Abril,2007. Cerro Colorado, Córdoba, Argentina. Hay tres o cuatro Argentinas que viven por separado. En el Norte de la provincia de Córdoba, el Cerro Colorado es una población amenazada por la destrucción, sin jóvenes, que han salido buscando oportunidades a la ciudad. Pero allí se encuentra el Museo de Atahualpa. Por la ruta nacional numero 9 hasta Santa Elena y después de 11 kilómetros por la 21, y te encuentras con una reserva natural, con rasgos cromáticos insuperables y un abánico de aves y mamíferos . Atahualpa Yupanqui sintió este lugar del mundo como suyo y allí, en ese paraje conocido como Agua Escondida, al amparo del río Los Tártagos, crece la vida de un Martín Fierro del siglo XX. "Una casa grande que regalé con mis libros, los puñales de mi abuelo, ponchos, aperos, regalos que me fue dando la gente en todos éstos años de recorrer el mundo".
31 de enero del 2008. centenario del nacimiento de Atahualpa, 16 años sin sus canciones, sin sus poemas , sin su vida. La Fundación Atahualpa Yupanqui, AFY, quiere desarrollar un programa divulgativo. Más teorico que práctico, propone "emoción y no dolor", un "modelo de nacionalidad basado en los valores tradicionales locales, pero sin héroes ni tiempos heroicos, sin elites ni legitimaciones". Ojalá se desvíen muchas rutas turísticas a éste rincón del mundo (un lugar en el mundo, que dijera el paisano Aristarain), y esa trilogía de siembra / cosecha / labranza, que defiende las personas que trabajan en la fundación AFY sirva de recuerdo y de sensibilización hacia el arte, la música y los valores que defendió el Atahualpa . El maestro no lo pudo decir mejor: "de pie en la noche como un árbol solo / esperándote estoy, luna del cielo".