No lo pienses, amiga,
el tiempo pasa deprisa
y el goteo de las horas
se come lo que desprecias.
La vida tiene tristeza
y obligaciones, amiga,
y gastas pronto las fuerzas
que a duras penas te quedan.
Amamantas a las gatas,
cuidas madres y te empeñas
en dejar brillo en el aire
y un sabor dulce de esencia;
pero de tristeza en pena
tu cuerpo, como una rata,
anda lento y se arrastra
y se acurruca y se seca.
No lo dudes, amiga,
el tiempo pasa deprisa
y el ritmo suave lo marcan
el amor y las sonrisas.