Robin Trower, músico desarrollado como solista en los setenta que empezó con los Procol Harum en el año 1.967, es uno de los mayores ejemplos de injusticia musical de la historia del rock.

Robin, para los que le han escuchado es uno de los mejores guitarristas eléctricos de la música moderna pero nadie lo reivindica ni lo recuerda. Este muchacho que actualmente ya ha cumplido los sesenta años y que espero que siga vivo ya que no lo he podido constatar, empezó con problemas ya que en su grupo musical, los Procol Harum, tenían a uno de los mejores guitarristas de Inglaterra pero no le dejaron tocar.

Procol Harum era un grupo suave, melódico y sobretodo sinfónico, donde se oían principalmente teclados y a Robin se le oía poco y se le veía menos, permaneciendo siempre en un segundo plano.

La razón de ese segundo plano y ocultación de Robin no sólo era de planteamiento musical sin también estética. La verdad es que la imagen de Robin nunca fue la que se esperaba a finales de los sesenta y principios de los setenta ya que Robin simplemente era bastante feo. Tenía una cara de caballo pero con nariz aplastada de boxeador que chocaba enormemente con la de sus colegas tipo Roberto Plant, Peter Frampton o Mick Jagger; además su melena era muy lacia y siempre con un flequillo corto y patético.

El pobre Robin solo apareció fotografiado en uno de sus discos, dentro de su magnífica carrera en solitario en los setenta, aunque eso sí las portadas de los discos eran excelentes y muy artísticas pero él no se atrevía a poner la cara.

Dicho lo anterior voy a comentar dos de sus mejores discos, donde se le llegó a comparar con Hendrix, comparación exagerada no en cuanto a su destreza y calidad que la tenía tanto como Jimmy sino en cuanto a su forma de tocar que yo la compararía con Clapton por su precisión aunque me atrevo a decir que incluso con más técnica que el citado. Su guitarra era incendiaria y precisa, sin abusar de la distorsión pero con una enorme fuerza.

DISCOS RECOMENDADOS

ROBIN TROWER LIVE!

Sensacional grabación de un concierto en Estocolmo del año 1.975. Unico disco donde aparece fotografiado en portada, aunque eso sí la foto está lo suficientemente difuminada para que no le vea bien la cara.

El disco es maravilloso. La guitarra vuela y explota en medio de temas apabullantes que para sí quisieran los Cream de Clapton. Empieza con “Too Rolling Stoned”, rock excelente y bien tocado como sólo se hacía en los setenta. También aparece una versión del popular blues “Rock Me Baby”, donde la guitarra echa chispas. Me encanta “Lady Love” que es más progresiva y las guitarras de “I Can´t Wait Much Longer”. Hay muy buen rock en “Aletea” y “Daydream” suena simplemente maravillosa dentro de una balada con bases de blues.

LONG MISTY DAYS

Nuevo pastel de los setenta, concretamente del 76, con canciones rotundas y casi perfectas.

El disco es excelente en su totalidad aunque destacaría tres temas: “Caledonia”, un rock con guitarras soul. “Long Misty Days”, un medio tiempo más progresivo donde las guitarras de Robin suenan de maravilla, siendo mi preferido el tema que cierra el disco “ Messin The Blues” que es un Blues-Rock rotundo y totalmente apabullante.

El resto también es maravilloso. Si encontráis estos discos u otros de este artista no os defraudarán pero la búsqueda no será fácil ¡ Suerte!.