Dan Brown
El código Da Vinci
Umbriel Editores – 2003

Novela de intriga, policíaca, histórica, religiosa, esotérica….,que editada por Umbriel y contra todo pronostico fue éxito de ventas en las pasadas Navidades, El código Da Vinci tiene y mantiene todos los ingredientes para gustar a un prototipo de lector poco exigente con la literatura y demasiado presionado por las novedades editoriales. No en vano, se ha alzado con merecimiento entre los primeros puestos de los libros mas vendidos a finales del 2003 y amenaza con consolidar el puesto a lo largo del 2004. La historia recuerda al esquema arquitectónico que tan fecundos beneficios les han reportado a autores como Arturo Pérez Reverte o Carlos Ruiz Zafón. Lineal hasta la extenuación, configurada con innumerables capítulos en los que se alternan los diferentes escenarios de la trama y que casi todos terminan con un a veces exasperante suspense, muestra en acción durante apenas dos días a quien mucho tememos tiene todas las papeletas para convertirse en protagonista de futuras obras a la manera de Indiana Jones: el experto en simbología Robert Langdon, quien sin pretenderlo se ve envuelto junto con Sophia, nieta del asesinado Conservador del Museo del Louvre y a la par último Gran Maestre de una Sociedad Secreta, en una supuesta conspiración telúrica que trasciende lo anecdótico, que mezcla a partes iguales Iglesia Romana con Opus Dei, Prioratos y Ordenes Templarias, en definitiva, acción por las cuatros esquinas y omisión de la verdad. Obra trepidante, su apasionante juego de claves ocultas, acertijos y espejos, no parecen suficientes excusas para que la historia de la literatura le reserve a El código Da Vinci un puesto de referencia en el futuro, aunque cierto es que se lee con gusto y hasta con una sonrisa en los labios, como los de la Gioconda de Leonardo, personaje omnisciente que planea sobre toda la novela.