La combinación de cine y música ha dado resultados irregulares, abundando mucho la mediocridad en este tipo de relación.

Las bandas sonoras es algo que nunca me ha entusiasmado, dado que, salvando momentos puntuales, la música transcurre como fondo de las escenas y no resalta en absoluto, reduciendo en muchos casos las canciones a unos pocos segundos. La música sube de tono en las escenas de acción y se relaja en las de amor. Los resultados más sobresalientes de “banda sonora” están en las películas históricas y del oeste de los años cuarenta y cincuenta tipo “ La Conquista del Oeste” o “Los Diez Mandamientos”. De esa época son también las películas estrictamente musicales, destacando las comedias donde se unían coros y bailarines, todo ello en perfecta coordinación, tal como ocurría en “Siete Novias para Siete Hermanos “ o “Bailando bajo la lluvia”. Este tipo de musicales tuvieron gran éxito en las décadas anteriores a los años sesenta y luego desaparecieron salvo alguna secuela de gran presupuesto y poco éxito.

En los cincuenta no podemos olvidar las películas de Elvis Presley, las cuales son generalmente irregulares y algunas muy malas, salvo cuando el “Rey “ cantaba, que era el momento esperado por los fans.
A partir de los sesenta empiezan a surgir cine musical mucho más interesantes. Los primeros en dar guerra fueron los Beatles en películas como “Help” y “Que noche la de aquel dia”, donde los Beatles se interpretaban así mismos como ídolos juveniles. Las películas eran pasables y la música maravillosa. También es de recordar la película “Shaft” con una excelente banda sonora de Isaac Hayes mostrándonos como hacer funky con orquesta. En los sesenta y sobre todo en los setenta aparecen películas musicales con ambiente pop-rock con otro ritmo y vitalidad, destacando “Hair”, “Jesucristo Superstar”, “Grease”, “Fiebre del Sábado Noche” y las que realizaron los Who “Quadrophenia” y “Tommy” y así algunas más. Las nombradas son todas ellas excelentes y aquí la música adquiere un protagonismo especial, con canciones imperecederas y sobresalientes. Fueron musicales de mucho presupuesto y de gran calidad. Otro ejemplo de película musical fue “El Muro” que anunciaba ya el final de una época y de los años setenta, de hecho la película es de los ochenta. La película es una paranoia psicodélica dirigida por Roger Waters caótica y tenebrosa con una de las mejores bandas sonoras de la historia. Para mí fue excelente y ha envejecido maravillosamente. Totalmente diferente de “El Muro” es “The Blues Brothers” una película maravillosa donde todo aficionado a la música negra tiene que disfrutar y mucho. Incluso los no muy aficionados a la música se volverán locos con esta fantástica película.

En los sesenta y setenta surgen también algunas películas exclusivamente documentales sobre conciertos de Rock, destacando “Woodstoock”, donde se describe el famosísimo concierto, intercalando las actuaciones musicales con los reportajes sobre lo que ocurría entre el público. La película es un caos maravilloso. En los setenta una de las más destacables es “El último Vals de la Banda” película de la segunda mitad de los setenta donde se dan cita Neil Young, Dylan, Clapton, Van Morrison y un largo etc arropando al grupo “The Band”. De los setenta también es “ Los chicos están bien” sobre la historia y las correrías del grupo The Who y en los ochenta tenemos “Let´s Spend Tehe Night Together” sobre las famosísima gira del 82 de los Rolling Stones, todo un documento.

A partir de los años ochenta y noventa surge otro fenómeno como es la película basada en un artista o en un grupo como puede ser “La Bamba” contando la historia del roquero Richi Valens, con interpretaciones maravillosas a cargo de “Los Lobos”. “The Doors” que la historia del famoso grupo de Los Angeles, centrada más en el sexo y la droga que en la propia música, la cual no es original del grupo sino reinterpretada. Hubo algunos desaciertos como la película que dedicaron a Jerry Lee Lewis y otra más acertadas como la dedicada a Tina Turner. Otra película de este tipo es “Sid & Nancy”, la cual es bastante mala contando la historia del bajista de los Sex Pistols Sid Vicious y su escabrosa relación con Nancy con final poco feliz. También se hizo una película sobre el ambiente glam con bastante presupuesto y escaso éxito cuyo título era “Velvet Godine”. Tal como se puede comprobar lo expuesto no dio grandes resultados aunque la idea era buena. Me gustó algo “Tal como éramos” basada en un grupo hippy melenudo de los setenta y “Rock Star“, sobre el fenómeno Heavy Metal de los Ochenta.

En los últimos años han surgido películas que contienen muy buenas canciones, aconsejando todas las de Tarantino, recogiéndose parte de ellas en el disco “Tarantino Collection” y, donde encuentras a Chuck Berry con los Blasters o a Charlie Sexton con The Marvericks o a grupos nuevos desgarrados y potentes. El cine de Tarantino es un cine donde se disfruta de la música. Buenas canciones contiene también “En el nombre del padre” donde se dan cita Dylan o Thin Lizzy con U2 y la banda sonora que más me ha gustado en los últimos años ha sido la contenida en “Dead Man Walking” que resulta ser una película crítica con la pena de muerte donde participan artistas tan buenos como Bruce Springsteen, Suzane Vega, Steve Earle, Tom Waits o Patti Smith, junto con otros muchos destacando sobremanera el increíble dueto que aparece en dos canciones y que pone los pelos de punta en la película entre el líder de Pearl Jam, Eddie Vedder, y el cantante Pakistaní Nusrat Fathe Ali Khan..