Roberto Arlt
Cuentos Completos
Editorial Losada - 2002

Un feliz regreso es por una parte, la presentación en sociedad de la nueva etapa de la Editorial Losada, la Editorial del exilio como algunos gustan de llamarla, y por otra de este uno de sus primeros volúmenes editados en España: Los Cuentos Completos del escritor argentino Roberto Arlt. Autor de culto, sus relatos están repletos de personajes contrahechos, mendigos, ladrones y asesinos, en definitiva todo un elenco de parásitos sociales y legiones de condenados que malviven en un submundo que nunca está a la vista, y con los que sin duda Arlt estaba acostumbrado a tratar. A pesar de haber publicado unos setenta relatos en la prensa bonaerense a lo largo de su vida literaria, no era un autor precisamente muy querido y respetado por sus coetáneos, e incluso Borges llegó a decir de él, que "era muy ingenuo, Se dejaba engañar por cualquier plan por descabellado que fuera para ganar mucha plata a condición de que viera en él algo deshonesto". Algo que indicaría no sólo el aprecio que le tenían sus colegas escritores sino el supuesto perfil moral de quien estamos hablando. Varias son las etapas que marcan su devenir literario en el apartado de los relatos, aunque si hubiera que resaltar una de ellas sería aquella que coincide con el viaje que realizó por España y el Norte de África. Sin menospreciar cuentos y relatos como El Jorobadito o Ester primavera, es de la fascinación de ese otro mundo, el musulmán, de donde habrán de salir algunos de los mejores, y más crueles, relatos del Roberto Arlt posiblemente menos argentino. Prueba de ello es La factoría de Farjalla Bill Alí, perteneciente a El criador de gorilas, en el que a la crueldad implícita de un apocalíptico personaje que se ensaña con sus esclavos, se le une la originada por una venganza teñida de brutalidad. Así, los cuentos de Roberto Arlt se leen desde una nueva perspectiva, esto es, obviando su condición argentina, ya que sólo de ese modo se pueden entender. Felicidades por tanto a la Editorial Losada en su regreso, y confianza para que continúe rescatando uno de los legados literarios del pasado siglo: su monumental catálogo.